Dada su singular orografía y su situación geográfica, entre dos mares y dos continentes, España cuenta con una rica variedad de ecosistemas que la convierten en un paraíso para los amantes de la naturaleza y las actividades al aire libre.

Más allá de sus casi 8000 km de litoral, con destinos de playa de fama mundial como la Costa del Sol, Ibiza, la Costa Brava o las Islas Canarias, por citar algunos ejemplos, España cuenta con una gran cantidad de espacios naturales en el interior del país que enamoran a quienes los visitan.

Desde que hace casi 100 años se creara el primer Parque Nacional en los Picos de Europa, son ya 15 los Parques Nacionales repartidos por todo el territorio, algunos de ellos tan conocidos como Doñana o Sierra Nevada, en Andalucía, o las Cañadas del Teide, en Tenerife, uno de los parques más visitados del mundo.

Todos estos lugares nos invitan a desconectar de nuestra rutina diaria y olvidarnos del tiempo para recorrerlos a pie, en bicicleta o a caballo, y disfrutar de actividades tan diversas como el rafting, la escalada o el buceo, al tiempo que conocemos gente de todos los rincones del mundo.